Carta nº20



A mi amada:
 Te fuiste, pero aquí todavía te espero. Estoy mirando la puerta y siento que en cualquier momento voy a verte entrar. Lo imagino todo: cruzas el marco y yo me acerco para acariciarte y al oído, en susurro, te pregunto: “¿Y ahora?, decime que sigue”, pero la verdad es que paso horas soñando, y cuando al fin despierto entiendo que no va a suceder. ¿Ya no vas a volver? Levantarme y saber que hoy tampoco voy a escucharte se vuelve duro.
Busco alguien que me diga que esto es mentira, necesito alguien que te traiga conmigo, necesito escucharte como siempre: “Abrigate”, “¿cenaste?”, “acompañame, dale”. ¿Cómo pudiste partir y dejarme?, a todos lados íbamos juntas, ¿Qué hago?
Me siento estafada, estoy tan enojada. Yo tenía que verte crecer y me arrebataste todo. Necesito urgente que me expliques qué sucedió, porque fue todo tan repentino, que ni siquiera alcancé a comprender. Esto no es justo. En el preciso instante que me viste por última vez y me abrazaste, yo deseé con el alma una vida entera a tu lado, pero te fuiste. ¿A dónde pensaste irte sin mi?, ¿por qué sin mi? Si a todos lados te hubiera seguido, si por vos pierdo cualquier miedo.
Recuerdo muy bien el lema de nuestra bandera: “Con la vida”, nunca pensé que esta frase tenga una falla. Me arrebataste la vida, y te fuiste con toda impunidad. Un día pienso tener el mejor ángel del mundo, y al otro día me lo quitan, ¿o habré sido yo la que te robó?, yo no sé cómo fue, pero vos me amabas. Me dijiste que eras feliz escuchándome cantar, vos me mirabas con los ojos llenos de dulzura, me acariciabas y me besabas como si esa fuera tu vocación.
Me creíste vencedora, me creíste exitosa, hasta donde yo me sabía fracasada. ¿Cómo se termina un amor así?, ángel mío, por favor, volvé, necesito abrazarte, no me dejes aquí, rodeada de extraños… Y ya no me creas vencedora en olvidarte, porque todo lo que soy es tu recuerdo. Dejame que vaya a buscarte, ya no pidas que me quede en este lugar. Aquí vos no estás, y ya no hay oportunidades para mi; y si las hay que pase el próximo, porque yo no las quiero.
¿Me esperas? Esto no puede separarnos, ¿verdad? No quiero que me mires desde arriba, quiero que me mires a los ojos, necesito encontrarle un sentido a todo. No me sueltes. El aire se tornó pesado, me cuesta respirar, y espero que esto no hayas sentido vos el día que te fuiste, porque te juro que no me lo perdonaría. Las noches me gritan tu nombre, el mundo se quedó sin música desde que me dejaste, desde que partiste.
¿Por qué nadie pensó en mí? ¿Nadie quiso acordarse de que sin vos, yo no vivo más?
Ya no tengo que mirar esta puerta, porque sé que no vas a llegar, quedaste atrapada en ese cajón frío, y aunque esté enojada, con vos por haberme dejado aquí solo, voy a seguirte.
Fue honor puro saberte mía, haber pasado los últimos años de nuestras vidas así, juntas. Haberte tomado la mano por la calle, y besarte sin freno fue un placer, un milagro verte despertar, hasta que un día ya no lo hiciste más.
Todavía, mi reina, es un honor que me duelas así.a
Dejo aquí esta simple carta, y voy a buscarte, gracias al mundo, pido perdón. Vos esperame, esto no va a separarnos, esperame, que llego y prendo dos cigarros.

Clara

Adaptación realizada el 26 de Septiembre del 2015


No hay comentarios:

Publicar un comentario

tsunami

Esto no es una canción No canto  Porque no te encuentro  Porque por horas,  días y lagrimas no te veo  No se, no te encuentro  Cuando no hac...